EL ABORTO:
Estamos conscientes de que el aborto voluntario es la cancelación de un proceso de vida; estamos seguras de que la gran mayoría de las mujeres que han pasado por este trance no lo han anhelado ni lo han practicado con alegría en sus corazones, ni disfrutan ni encuentran gozo en esta dolorosa decisión. El aborto ha sido para ellas un último recurso porque quieren evitar un mal menor: no humanizar una vida. El aborto representa de manera dramática un rechazo a la deshumanización. Cuando como sociedad somos incapaces de asegurar una vida digna y realmente humana para los millones de pobres y los extremadamente pobres, con toda seguridad podemos hablar de la gran injusticia social como la verdadera causa de que el aborto resulte la última salida para muchas mujeres de escasos recursos económicos.
MATEO GONZALEZ SANTOS